Marcó
cerca de 600 goles, máximo goleador en tres países diferentes y aún tiene el
mayor porcentaje de goles en la selección española: 17 goles en 12 partidos.
Ahora
que muchos equipos de fútbol juegan sin nueve, sin delantero centro, se hace
necesario recordar al mejor delantero rematador de la historia de nuestro
fútbol. Se llamó Isidro Lángara Galarraga y era guipuzcoano de Pasajes. Era un
mocetón de casi 1,90 con un disparo con ambas piernas que mandaba a los
porteros al hospital, los incrustaba contra las redes o hacia vibrar los postes
con sus balonazos. Le llamaban “El tanque” y tuvo cinco equipos en su vida el
Real Oviedo (1933-36 y 1946-48) la selección española (1932-1936), la selección
vasca (1937-1939), el San Lorenzo de Almagro argentino (1939-43) y el Real
España de México (1943-46).
Se le han contabilizado cerca de 600 goles en 17 años de carrera y entre ellos 13 “hat tricks” (tres goles en un solo partido). Como anécdota a Portugal, en la clasificación para el Mundial de 1934, le endosó 5 goles de los 9 que marco España. Lángara solo jugó 12 partidos con la selección española pero marcó 17 goles, porcentaje de goles aún no superado. En su primera etapa con el Oviedo marcó 104 goles en 90 partidos, en Argentina, en las cuatro temporadas en San Lorenzo de Almagro marcó 110 goles en 121 partidos. Su primer partido con San Lorenzo fue contra River Plate, prácticamente recién bajado del barco, y le metió cuatro goles. Un Alfredo Di Stefano de doce años estaba en la grada y contaba Don Alfredo que no podía dar crédito a lo que vió.
Isidro Lángara vino al mundo en Pasajes Ancho (Guipúzcoa) el 25 de mayo de 1912. Al morir su padre, cuando contaba 13 años, ingresó en la Algodonera Fabril Subijana como aprendiz de tornero. Alternaba su trabajo con el fútbol porque su hermano mayor Jesús, le llevaba a entrenar al campo del Euskalduna. Jesús descubrió su potencia de tiro cuando Isidro tenía diez años. Jugo sus primeros años en equipos guipuzcoanos. Después estando en el Tolosa se interesó por él el Oviedo, que estaba en segunda división. Se hizo el traspaso y el Tolosa recibió 3.000 pesetas, Lángara 4.000, su sueldo mensual era de 500 pesetas. Con el Oviedo se dio a conocer, subieron a primera y fue máximo goleador (Pichichi) tres años seguidos (1934-36).
Se le han contabilizado cerca de 600 goles en 17 años de carrera y entre ellos 13 “hat tricks” (tres goles en un solo partido). Como anécdota a Portugal, en la clasificación para el Mundial de 1934, le endosó 5 goles de los 9 que marco España. Lángara solo jugó 12 partidos con la selección española pero marcó 17 goles, porcentaje de goles aún no superado. En su primera etapa con el Oviedo marcó 104 goles en 90 partidos, en Argentina, en las cuatro temporadas en San Lorenzo de Almagro marcó 110 goles en 121 partidos. Su primer partido con San Lorenzo fue contra River Plate, prácticamente recién bajado del barco, y le metió cuatro goles. Un Alfredo Di Stefano de doce años estaba en la grada y contaba Don Alfredo que no podía dar crédito a lo que vió.
Isidro Lángara vino al mundo en Pasajes Ancho (Guipúzcoa) el 25 de mayo de 1912. Al morir su padre, cuando contaba 13 años, ingresó en la Algodonera Fabril Subijana como aprendiz de tornero. Alternaba su trabajo con el fútbol porque su hermano mayor Jesús, le llevaba a entrenar al campo del Euskalduna. Jesús descubrió su potencia de tiro cuando Isidro tenía diez años. Jugo sus primeros años en equipos guipuzcoanos. Después estando en el Tolosa se interesó por él el Oviedo, que estaba en segunda división. Se hizo el traspaso y el Tolosa recibió 3.000 pesetas, Lángara 4.000, su sueldo mensual era de 500 pesetas. Con el Oviedo se dio a conocer, subieron a primera y fue máximo goleador (Pichichi) tres años seguidos (1934-36).
Mundial de Italia
Disputó el Mundial de Italia de 1934, en el que pudo jugar dos partidos, marcando dos goles en la eliminación de Brasil. El siguiente partido con Italia quedó en empate (1-1) y Lángara fue pateado hasta la extenuación. En el partido de desempate, con una España diezmada, ganó Italia 1-0 y Mussolini tuvo lo que quería. Aquella selección española que fue a Italia fue quizá el mejor combinado nacional antes de “La Roja” con jugadores del nivel de Lángara, Regueiro, Zamora, Quincoces, Cilaurren, Errasti y Gorostiza entre otros. La guerra civil que truncó tantas cosas acabó con las competiciones nacionales. Lángara junto con otros compañeros vascos (los hermanos Regueiro, Gorostiza, Aedo, Alonso, Cilaurren, Larrínaga y Sabino Aguirre entre otros) integraron la Selección de Euskadi que desarrolló una larga gira propagandística y de recaudación de fondos para la República. Acabada la guerra la mayoría tuvo que exiliarse, sobre todo a México, donde jugaron la liga mexicana como Club Deportivo Euskadi. En 1939 recala en Buenos Aires fichado por el San Lorenzo de Almagro, donde jugaba su amigo de la selección vasca Ángel Zubieta, y que era ya el equipo de los españoles emigrados en Argentina. Cuatro primorosas temporadas con los “cuervos” que se saldaron con 104 goles.
Disputó el Mundial de Italia de 1934, en el que pudo jugar dos partidos, marcando dos goles en la eliminación de Brasil. El siguiente partido con Italia quedó en empate (1-1) y Lángara fue pateado hasta la extenuación. En el partido de desempate, con una España diezmada, ganó Italia 1-0 y Mussolini tuvo lo que quería. Aquella selección española que fue a Italia fue quizá el mejor combinado nacional antes de “La Roja” con jugadores del nivel de Lángara, Regueiro, Zamora, Quincoces, Cilaurren, Errasti y Gorostiza entre otros. La guerra civil que truncó tantas cosas acabó con las competiciones nacionales. Lángara junto con otros compañeros vascos (los hermanos Regueiro, Gorostiza, Aedo, Alonso, Cilaurren, Larrínaga y Sabino Aguirre entre otros) integraron la Selección de Euskadi que desarrolló una larga gira propagandística y de recaudación de fondos para la República. Acabada la guerra la mayoría tuvo que exiliarse, sobre todo a México, donde jugaron la liga mexicana como Club Deportivo Euskadi. En 1939 recala en Buenos Aires fichado por el San Lorenzo de Almagro, donde jugaba su amigo de la selección vasca Ángel Zubieta, y que era ya el equipo de los españoles emigrados en Argentina. Cuatro primorosas temporadas con los “cuervos” que se saldaron con 104 goles.
En 1946 vuelve a España, al parecer por intercesión de
Felipe Polo -cuñado de Franco- directivo del Oviedo, su antiguo club que le
echaba mucho de menos con el que jugó dos temporadas más hasta su retirada en
1948 con 36 años. El ambiente que había en España en la posguerra no le gustó
nada y se vuelve a México. En 1950-51 dirige como entrenador al Unión Española
de Chile, después de vuelta en México al Puebla, con el que fue campeón de
México en 1953. En 1955 de vuelta a Argentina entrena a San Lorenzo de Almagro.
Al acabarse el fútbol trabajó un tiempo en la empresa de su amigo Luis Regueiro
en México donde se estableció.Viajó frecuentemente a España. Madrid, Oviedo,
Andoain. Siempre el mismo recorrido.En 1943 vuelve a México para jugar un par
de temporadas con el Real Club España, con el que es máximo goleador en las
temporadas 1943-44 y 1945-46.Cuando le atacó el mal de alzheimer, ya en 1990,
se estableció en Andoain, en casa de su sobrina María Jesús, hija de su hermano
Jesús. Pasaba muchas tardes junto al padre de Luis Miguel Arconada viendo los
partidos de la Real Sociedad y hablando de fútbol. Isidro Lángara Galarraga,
que había sido máximo goleador en tres países diferentes, falleció en Andoain
el 21 de agosto de 1992, apenas dos semanas después de que España se proclamase
campeona olímpica de fútbol en Barcelona.
__
De PORTAL CARTA DE ESPAÑA, 2010
Imagen: Isidro Lángara en una portada de El Gráfico
No comments:
Post a Comment