Thursday, March 8, 2018

Mi Manifiesto


PAZ MARTÍNEZ

He pensado mucho en si escribir algo o no sobre del día de la mujer, de la huelga y lo poquitísisisisisisisimo que me gusta todo esto. Las razones son obvias, ya que no creo que haga falta un escaparate, un nodo, una peli, un libro, una huelga, un día para ver lo que nos encontramos día a día por la calle, escuchar lo que decimos o analizar lo que pensamos. Todo esto es, simplemente, un espectáculo. Y no es que esté en contra de los espectáculos, me encantan, pero me indigna ver como algunos necesitan de ellos para ver a su pareja, a su familia, a sus vecinos, de manera diferente a como lo hacían hasta ahora. Habla muy mal de ellos y ellas, de su capacidad de análisis, de su criterio, de lo simples que somos los humanos y lo bien que nos lleva el viento. Manipulación, se llama. Y, queridos míos, aceptarlo, no somos seres pensantes, somos seres manipulables y manipulados 100%.

Es cierto que las mujeres somos minusvaloradas diariamente, tratadas en infinidad de ocasiones como seres de tercera o cuarta clase. Si el hombre, en su estado de humano pobre y seguidor, es considerado por el poder como número, la mujer es considerada por el número, como su sirviente y como idiota por el poder. Sí o sí. 

Los que me conocen saben que huyo como la peste de "los días internacionales de", me parecen un "Sí, tienes razón pero te aguantas" Porque si, el poder, conoce el problema, la solución es obvia. Os pongo un ejemplo. En 1975, se hizo lo mismito que hoy en Islandia: una huelga femenina en toda regla, que contó con el 80% de participación. Los colegios cerraron, muchos negocios también y los varones tuvieron que hacerse cargo de todo, siendo el mejor día para los churumbeles, que fueron a trabajar con papi y salieron hasta por la tele. Resultado: 5 años después, la primera mujer lesbiana presidenta del país, cambió leyes. No es que sea una panacea, no es que sea el país de nunca jamás, es una mierda repleta de clasistas, machistas, maltratadores y neoliberales, pero una cosa tienen clara: el bien común, no tiene ideología. 

Es realmente patético ver, sentir o leer ciertos comentarios. Esto no es una guerra de bandas, no es una pelea por el poder, seguimos y seguiremos siendo cagones, siendo mindundis, siendo los pobres parias colonizadores de la nada. Mi feminidad o tu virilidad no está en juego, no estoy en guerra con ningún varón, no lo estaré jamás, también por mi santa cobardía, pero es que es ridículo culpar al vecino de tus males. Esto es, simple y llanamente, una obviedad o, para que se entienda en todas partes: "entre iguales no nos pisamos la minga" Ni ellos son culpable, ni nosotras unas brujas. Ni ellos son unos mierdas, ni nosotras unas feminazis. Somos unos puñeteros azares cromosómicos, pero esos cromosomas no son la cruz de Israel, ni los estigmas de cristo, son dos cosas minúsculas que necesitan de un microscopio para verlas. He leído no sé cuántas chorradas sobre la biología femenina y millones de parvadas más. ¿Tanto cuesta entender que mi pecho y mi vagina no hacen nada por sí solas? ¿Tan difícil es ver que un pene no piensa, ni actúa, ni siente, ni padece? ¿O es que ya hemos llegado al punto de no retorno de la estupidez? 

Terminando, que es gerundio. Sepan, queriditos de mi vida y mi corazón, que ser femenino no es ser llorón ni victima ni sensible ni especial. Ser femenino es tener sexo, usarlo y disfrutarlo. ¡¡¡Coño, mira tú, lo mismito que ser masculino!!!

P. D. Me acaba de bloquear un muchacho bienintencionado con un relato completito de micromachismos. No le gustó escucharlo. Ay, dios!! 


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Imagen: Marc Chagall/Acróbata

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